Es un tipo de masaje que te permitirá movilizar tu energía sexual, la energía primigenia y más poderosa que existe, desde tus genitales hasta el corazón.
El masaje tántrico es erótico, es sensual, pero, sobre todo, es un acto de amor, un acto de entrega máxima, en el que se utiliza nuestra energía fundamental, hasta que se trasciende lo sexual y se consiguen estados de relajación y de éxtasis.
Es una herramienta terapéutica que te conectará con tu cuerpo y con tu placer, que te ayudará a desbloquear emociones, a expandir tu energía, y a vivir la sexualidad con mayor plenitud.
La respiración y el tacto consciente serán los instrumentos básicos para inducir esos estados de relajación, y para elevar tu energía sexual y hacerla girar por todo tu cuerpo.
La duración de cada sesión podrá ser de una hora, o de una hora y media.