Después de media vida dedicada a la Economía y al mundo de la empresa, llegué a la conclusión de que esa no era la forma como quería vivir mi vida. Creo que decidimos demasiado jóvenes sobre lo que nos gustaría ser, cuando en realidad las verdaderas pasiones surgen a lo largo de la vida.
La transformación personal me llegó por el mundo del sexo. Descubrí que se podía vivir la sexualidad de una forma diferente a lo común, mucho más placentera, que se podía llegar a tener experiencias únicas que apenas se conocen, que no tienen la mayoría de las personas. Somos seres sexuales, todas las células de nuestro cuerpo lo son, y son enormes las posibilidades que tenemos de sentir y de hacer sentir a nuestras parejas o a las personas con las que tenemos sexo. La sexualidad no es únicamente genitalidad, se puede vivir como una experiencia total, que abarque cada átomo de nuestro cuerpo.
Cuando empecé a tener este tipo de experiencias me pareció inexplicable que nadie nos hubiera contado nunca que existieran tales posibilidades, y sentí la necesidad de compartir lo que había vivido. A partir de ahí comencé a formarme, me hice sexólogo y terapeuta de pareja, me gradué como coach personal y ejecutivo, me formé en tantra y tao sexual, en masajes tántricos, y comencé a absorber cuantos libros de sexualidad caían en mis manos.
Desde hace ya tiempo disfruto haciendo lo que realmente me gusta, que es hacer que las personas mejoren su vida sexual, a través de cursos y de terapias individuales, y que vivan las experiencias que un día me fueron regaladas a mí. He sido co-presentador del programa «Sexualiza2» en Miami tv, dirijo el programa Sextropía en Diverzity y colaboro con diferentes medios de comunicación en radio y prensa.
He publicado dos libros: Placeres para ser libres y El estigma de «puta». Ambos contienen ingredientes para ayudar a que las mujeres consigan la igualdad a través de la sexualidad, la gran olvidada en ese duro camino.
Después de media vida dedicada a la Economía y al mundo de la empresa, llegué a la conclusión de que esa no era la forma como quería vivir mi vida. Creo que decidimos demasiado jóvenes sobre lo que nos gustaría llegar a ser, cuando en realidad las verdaderas pasiones surgen a lo largo de la vida.
La transformación personal me llegó por el mundo del sexo. Descubrí que se podía vivir la sexualidad de una forma diferente a lo común, mucho más placentera, que se podía llegar a tener experiencias únicas que apenas se conocen, que no tienen la mayoría de las personas. Somos seres sexuales, todas las células de nuestro cuerpo lo son, y son enormes las posibilidades que tenemos de sentir y de hacer sentir a nuestras parejas o a las personas con las que tenemos sexo. La sexualidad no es únicamente genitalidad, se puede vivir como una experiencia total, que abarque cada átomo de nuestro cuerpo.
Cuando empecé a tener este tipo de experiencias me pareció inexplicable que nadie nos hubiera contado nunca que existieran tales posibilidades, y sentí la necesidad de compartir lo que había vivido.
A partir de ahí comencé a formarme, me hice sexólogo y terapeuta de pareja, me gradué como coach personal y ejecutivo, me formé en tantra y tao sexual, en masajes tántricos, y comencé a absorber cuantos libros de sexualidad caían en mis manos.
Desde hace ya tiempo disfruto haciendo lo que realmente me gusta, que es hacer que las personas mejoren su vida sexual, a través de cursos y de terapias individuales, y que vivan las experiencias que un día me fueron regaladas a mi. He sido co-presentador del programa «Sexualiza2» en Miami tv, y actualmente dirijo el programa Sextropía en Diverzity y colaboro con diferentes medios de comunicación en radio y prensa.
En este libro encontrarás relatos eróticos que te permitirán llegar a rincones escondidos de tu deseo, que te proveerán de recursos para conquistar placeres desconocidos.
En su interior hallarás, también, respuestas a preguntas como las siguientes:
Deja a un lado los prejuicios, despójate de creencias limitantes y, mientras lo lees, permítete viajar tan lejos como la imaginación y el deseo te quieran llevar.
El estigma de «puta» es el paradigma de control invisible sobre la sexualidad femenina, la quintaesencia de cualquier sistema patriarcal, el leitmotiv que se esconde detrás de cada acción de censura sobre el comportamiento sexual de las mujeres. La intensidad del estigma de «puta» es directamente proporcional al grado de vigencia de las sociedades patriarcales. Nunca un indicador nos dirá tanto de una sociedad.
¿Por qué nació el estigma de «puta»? O, mejor dicho, ¿Para qué nació el estigma de «puta»? ¿Para qué seguimos obviándolo si es el paradigma de todos los estigmas, la madre de todas las deshonras sociales? ¿Qué nos impide luchar contra un estigma que afecta a todas las mujeres, si contra otros ya lo hacemos abiertamente? ¿Por qué todas las sociedades quieren tener controlada la sexualidad femenina?
Encuentra respuestas a todas las preguntas anteriores, y descubre qué es la «Teoría P», y por qué regular el trabajo sexual permitirá reducir la violencia machista y será clave para conseguir la igualdad entre mujeres y hombres. Conoce una aproximación diferente a la raíz de la violencia machista, y averigua por qué todavía sufrimos las reminiscencias de los sistemas patriarcales que nos precedieron.
A estas alturas del siglo XXI el estigma de «puta» sigue condicionando la vida de las trabajadoras del sexo y de todas las mujeres del mundo, minando su autoestima y menoscabando su sexualidad ¿No es hora ya de trabajar juntos, y en la dirección adecuada, para terminar de una vez con este cruel estigma?